Por Equipo de Redacción
Publicado en 14 de diciembre de 2023
Los inversores deben conocer bien los fondos ESG y evaluar organizaciones serias para evitar que el dinero caiga en prácticas de lavado verde (greenwashing).
La agenda ESG ha ido ganando cada vez más relevancia, fortaleciendo la imagen de las corporaciones y ejecutivos que lideran la implementación de buenas prácticas en el país y en todo el mundo. Sin embargo, invertir en acciones ESG y en organizaciones que realmente implementen la sostenibilidad puede ser una tarea desafiante y difícil. Esto se debe a que muchas empresas terminan practicando el llamado ‘greenwashing’, donde promocionan una falsa imagen de sostenibilidad y afirman ser lo que no son.
“Este ‘maquillaje verde’ puede confundir al público, pero los inversores deben tener cuidado, tanto por las posibles consecuencias ambientales y la pérdida de inversiones relevantes y asociaciones comerciales para la empresa, como para cumplir con la ley, asegurando riesgos legales, contables y financieros”, afirma Claudinei Elias, fundador y CEO de Bravo GRC (una empresa de tecnología y consultoría especializada en la implementación de soluciones de Gobernanza, Gestión de Riesgos Corporativos y ESG), quien recientemente asumió el cargo de Socio y CEO Global de Ambipar ESG.
Pensando en cómo ayudar a los inversores a tomar decisiones lo más acertadas posible, el experto proporciona cinco consejos para aquellos que desean invertir en buenas prácticas en 2024.
1 – Las empresas con perspectivas ESG tienden a proteger y generar más valor a largo plazo.
El primer consejo para las inversiones ESG es: comiencen. Las empresas que integran una estrategia ESG en su toma de decisiones son más conscientes de los riesgos que las rodean, reduciendo consecuentemente el impacto de los riesgos negativos y aprovechando mejor las oportunidades. Estas empresas reducen su riesgo reputacional y demuestran una mayor confiabilidad en sus operaciones.
2 – Comprender los diversos tipos de inversiones dentro del universo ESG
Existen varias formas de invertir en «ESG», incluida la opción de invertir en una sola empresa que cumpla con los requisitos ESG. Los ETF contienen varias empresas de diferentes segmentos, reduciendo el riesgo sectorial pero manteniendo el valor de la sostenibilidad. También es importante destacar que el universo ESG incluye fondos de impacto, principalmente enfocados en el desarrollo social y climático.
3 – Define tus criterios, prioridades y apetito por el riesgo
Una cosa importante en el mundo de la inversión es que el inversor tome decisiones por sí mismo, después de todo, nadie mejor que tú mismo para saber dónde invertir tu dinero. Dicho esto, es importante saber que el mundo del ESG es bastante complejo, abarcando varios indicadores y propuestas. El inversor puede elegir uno específico en el que enfocarse, como por ejemplo, empresas de energía renovable que están ayudando en la transición de la matriz brasileña. Otro ejemplo es determinar tu apetito por el riesgo; algunas empresas muy innovadoras en sostenibilidad también llevan consigo un mayor riesgo de inversión.
4 – Verifica la posibilidad de lavado verde (greenwashing), lavado social (socialwashing) y lavado rosa (pinkwashing)
El lavado verde es un problema que ha estado afectando al mercado en cuanto al tema de ESG, principalmente porque quienes lo practican afectan al mercado de dos maneras: desacreditando a empresas que realmente incorporan la estrategia ESG en la toma de decisiones e inversores/personas que han depositado su confianza en una empresa que practica el lavado verde y perjudica al mercado en general. Por supuesto, es muy difícil identificar el lavado verde dentro de las empresas, pero a menudo, investigaciones rápidas en sitios de noticias pueden contener información valiosa sobre la verdadera reputación de la empresa en cuanto a sus empleados, clientes, proveedores, etc.
5 – Aprende a integrar el ESG en tu cartera
Como todo buen inversor, debes saber cómo integrar las acciones ESG en tu cartera, es decir, saber cómo componer la diversificación de tus activos. No se recomienda que las inversiones sesgadas hacia ESG sean la totalidad de tu inversión, sino más bien parte de una estrategia mejor, asegurando que tu cartera mitigue riesgos de varias formas. Por ejemplo, una cartera con renta fija (mitigando riesgos de mercado), empresas energéticas ESG (mitigando riesgos de transición) y activos dolarizados (mitigando riesgos Brasil).