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O Globo por Rachel Maia - 24/05/2024

Equipe redação

Por Equipo de Redacción
Publicado en 24 de noviembre de 2024

Rafael Tello, vicepresidente de Sostenibilidad de Ambipar y director científico del Instituto ATMOS — Foto: Divulgación.

La Conferencia de las Naciones Unidas (ONU) sobre Cambio Climático COP29 (2024), celebrada del 11 al 22 de noviembre en Bakú, Azerbaiyán, representó un avance considerable. Discutir la importancia de un acuerdo entre los países sobre el financiamiento climático nos conducirá a las acciones necesarias que impactan a todo el mundo.

Los problemas climáticos deben analizarse considerando que el tiempo no está a nuestro favor y que debemos usarlo de manera estratégica para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero y unir a los representantes de todos los países en un mismo objetivo: preservar el planeta Tierra y usar las riquezas naturales de manera responsable.

Brasil, que se prepara para la COP30, que se celebrará en Belém en 2025, participó activamente en la COP29, liderando debates sobre temas de sostenibilidad, descarbonización de la economía brasileña y prácticas empresariales en la Casa Brasil — un stand de 200 m² diseñado para mostrar las bellezas y atractivos de nuestro país, organizado en asociación con Sebrae, como informa la publicación del portal del gobierno federal.

Rafael Tello, vicepresidente de Sostenibilidad de Ambipar y director científico del Instituto ATMOS, estuvo presente en la COP29 y contribuyó con este artículo aportando sus percepciones fundamentadas en su experiencia como miembro del Comité ESG de Bartofil (donde colaboró para el avance de las prácticas de gobernanza ambiental, social y corporativa) y su desempeño como coordinador de la Red Desafío 2030 y del Hub ODS MG, donde ayuda a las empresas en la implementación de los 17 ODS.

Graduado en Economía por la Universidad Federal de Minas Gerais (UFMG) y posgraduado en Gestión de Sostenibilidad por la Leuphana Universität, destacó la representación brasileña en Bakú.

“La delegación brasileña estaba compuesta por representantes con experiencia en COPs y sostenibilidad corporativa y con poder de toma de decisiones dentro de sus organizaciones. La gran ganancia que hemos tenido de nuestra participación recurrente en las COPs son las discusiones de alta calidad que propician nuevas acciones y resultados”, comenta Rafael.

La importancia de contar con representantes brasileños como el vicepresidente Geraldo Alckmin, la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático Marina Silva y el ministro de Turismo Celso Sabino, quienes promovieron acciones para fomentar la información y combatir la desinformación (fake news) sobre un tema tan importante como el clima, y su posición asertiva para guiar las proyecciones de la COP30, coloca a Brasil en un lugar destacado para lograr resultados significativos en su contribución al planeta.

Fueron 12 días de debates y más de 40.000 delegados, entre ellos representantes de 198 países, participando activamente para establecer reglas para el mercado de carbono y conducir las negociaciones climáticas que involucran a todo el mundo.

Reunir a representantes y especialistas considerando que estamos contra reloj y que necesitamos avanzar en la toma de decisiones es importante en este momento en que ya nos preparamos para la próxima COP. Tello sabe la relevancia de la cooperación y el consenso entre los líderes y reafirma el poder de la unión y el diálogo.

“Los encuentros promovidos en la COP29 pudieron transformarse en buenas conversaciones y evolucionar hacia potenciales cooperaciones, asociaciones y proyectos, promoviendo espacio para mucha acción. La siembra de estas semillas tuvo lugar en esta COP, y ahora tenemos un año para convertir estas ideas en propuestas, hacerlas realidad y mostrar al mundo la capacidad de Brasil para ser protagonista en la economía verde”, enfatiza el especialista.

El cambio climático nos ha colocado en un estado de alerta mundial, y Brasil asumió el compromiso de tratar la sostenibilidad y la economía del país, poniendo el foco en la biodiversidad y el turismo de Belém, anfitrión de la COP30.

Acelerar las acciones para combatir las crisis climáticas y cumplir con los objetivos del Acuerdo de París todavía es posible, pero para ello serán necesarias inversiones. La publicación en el portal de la ONU indica que será necesario un financiamiento de billones de dólares para lograr una reducción significativa de las emisiones de CO2. Y como dijo António Guterres, secretario general de la ONU, “el fracaso no es una opción”.

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